La CAI recibe en el Municipal a Independiente Rivadavia de Mendoza desde las 17 en un duelo postergado en su momento por el conflicto aéreo. Los de Vivaldo intentan mejorar su deficitaria cosecha como local a cuatro días de una dura derrota. No vuelve Funes.
Primero el fallecimiento del ex presidente Kirchner y después un conflicto de las empresas aéreas, hicieron que el partido entre la Comisión de Actividades Infantiles e Independiente Rivadavia de Mendoza se llenara de asteriscos. Recién se pondrán al día jugando en el estadio Municipal desde las 17 completando el pendiente de la fecha 13. En la Primera B Nacional todo es tan dinámico que no tiempo para lamentos. El equipo sureño viene de perder ante Instituto y a cuatro días de un “raro” 0-1 con el viento instalado en el Municipal, tiene hoy la obligación de volver a sumar. La CAI es el peor local del campeonato, se debilita cada vez que le toca jugar ante su gente cuando lo que cuenta es una campaña a la inversa. Los números no le cierran: solamente ganó 1 de los 6 partidos que disputó en el sur y se quedó sin nafta después de una seguidilla de 4 juegos sin derrotas. La CAI quiere derribar esos muros, por ahora inalcanzables y buscará cicatrizar rápido una herida que le provocó Instituto, encontrándole la vuelta al clima patagónico y ganando por la mínima, habiendo podido aumentar esa diferencia. El equipo de Vivaldo –que nuevamente dirigirá ante uno de sus ex clubes- sigue fallando en la definición. No factura lo que genera y eso repercute no solamente en los resultados, sino en la confianza generalizada. La Lepra tiene que ser otro capítulo en el libro de la resurrección. Malcorra volverá a ser titular en lugar de Luis Funes, que sigue lesionado y recién podría recuperarse para el viaje a Tucumán de éste fin de semana.
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